Alrededor de 400 niños murieron en un orfanato en Escocia dirigido por monjas. Las investigaciones señalan que fueron enterrados en una fosa común.
Las hijas de la Caridad de San Vicente de Paul son las encargadas de llevar el orfanato del parque Smyllum. Fueron ellas quienes voluntariamente reconocieron que habían enterrado a 158 niños en dichos terrenos.
Sin embargo, la investigación ha revelado otro tipo de información. 402 bebés y niños fueron enterrados en una fosa común a una milla del orfanato, desde el 1864 hasta 1981.
En el lugar hay lápidas que señalan a monjas y miembros del personal enterrados allí. Pero, no existe ninguna piedra o monumento que haga referencia a los niños.
Las declaraciones del ex Primer Ministro, Jack McConell sugieren comenzar investigaciones más exhaustivas para dar con las respuestas a este suceso tan lamentable.
Los niños huérfanos y las familias desesperadas solían recurrir a este orfanato. Si los registros son correctos, existiría un promedio de un niño muerto cada tres meses desde que el orfanato abrió sus puertas.
Fotografía tomada en el año 1944 antes de la muerte de Louise Langlois (El quinto a la izquierda en la fila de atras. Foto cortesía: Daily Record
El caso se hace más tenso cuando ex residentes del orfanato declararon que las monjas tenían una conducta inadecuada con algunos niños. Se les acusa de mal tratar y descuidar a algunos menores. Estas declaraciones inspiraron la campaña de abuso infantil que actualmente se promueve en Escocia.
La ONG a cargo del orfanato aportó “pruebas” de que en el historial de la Institución nunca han existido evidencias de maltrato. Declarando así, todo esto como un “misterio” y algo “poco probable”
Lo que más llama la atención del caso es que los familiares de los niños solicitan una investigación más exhaustiva. Utilizando equipos de radar de penetración terrestre para así conocer con exactitud cuantos cuerpos de menores están enterrados allí.
El argumento por el cual se cree que hay 400 niños es que existen esa cantidad de certificados de defunción. Sin embargo, se desconoce el lugar dónde fueron enterrados esos cuerpos. La mayoría de los casos son decesos por enfermedad de la época o desnutrición.
Lo cierto del caso es que a una milla del orfanato están enterrados cientos de niños. Para conocer su exactitud el gobierno local y los familiares sugieren la utilización de GPR (radares de penetración terrestre) y tecnología avanzada que pueda esclarecer más lo que sucedió hace unas décadas.
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